
Ayer se cumplieron ocho días del regreso a los entrenamientos de San Lorenzo y Andrés Silvera sigue sin aparecer. Todo lo contrario que los rumores, ya que el Cuqui no responde llamados ni de los propios dirigentes ni del cuerpo técnico. Lo único seguro es que el delantero considera que la relación con la gente de Boedo está lo suficientemente desgastada como para no seguir jugando allí.Lo que pretendería su representante, Daniel Mandarino, es negociar una salida con el club. En un principio se especulaba con que Silvera recurriera a Agremiados, como lo hizo Agustín Orión, entre otros, para quedarse con el pase en su poder. Sin embargo, la intención sería llegar a un acuerdo entre las partes. Y, pese a las especulaciones que se hicieron, querría seguir jugando.Es un hecho: Silvera no seguirá en San Lorenzo.
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